Esta crema suave y ligera de espinacas es una de las maneras más ricas y sencillas de consumir antioxidantes, vitaminas, potasio, hierro y fibra. ¡Anímate a prepararla y déjate conquistar por su sabor único!
En una olla calienta a fuego medio el aceite de oliva, agrega la cebolla, los ajos y el tomate y sofríe 3 minutos.
Añade las papas, la cebolla en polvo y el ají en escamas. Cocina 3 minutos más a fuego medio.
Incorpora la espinaca y el perejil y sofríe a fuego medio 2 minutos.
Vierte el caldo de manera que el líquido apenas cubra los ingredientes, sazona con sal y pimienta al gusto, tapa y deja cocinar a fuego medio bajo unos 15 minutos o hasta que la papa esté blanda.
Retira del fuego y deja enfriar 10 minutos.
Pon en la licuadora los ingredientes incluyendo el agua y licúa muy bien hasta obtener una crema ligeramente espesa y sin grumos.
Vierte la crema resultante nuevamente en la olla, rectifica sabores con sal marina y pimienta al gusto si es necesario. Deja hervir 5 minutos o hasta obtener la consistencia deseada. Si quieres la crema más ligera puedes agregar un poco más de caldo o si por el contrario la deseas más espesa, deja cocinar un poco más hasta que espese.
Retira del fuego y deja reposar 5 minutos antes de servir.
Sirve caliente con pan tostado en cuadritos, un poco de crema agria o crema de leche.